Lo que se suponía que sería un día de trabajo normal para una joven camarera terminó convirtiéndose en una experiencia que nunca olvidará.
Tras ayudar al famoso boxeador mexicano Saúl “Canelo” Álvarez en un restaurante, la mujer fue despedida inesperadamente. Sin embargo, lo que ocurrió al día siguiente le dio un giro inesperado a su destino.
Según testigos, la mesera, identificada como Mariana, se encontraba trabajando en un restaurante de lujo en Guadalajara cuando Canelo Álvarez ingresó al lugar con un grupo de amigos.
Como cualquier profesional del servicio, la joven hizo lo posible para atenderlo de la mejor manera posible, procurando que todo estuviera perfecto para el campeón.
Sin embargo, lo que parecía una simple cortesía no fue bien recibido por la gerencia del restaurante. Mariana reveló en redes sociales que, tras ayudar personalmente a Canelo con un pedido especial y tomarse una foto con él a petición del boxeador, recibió la notificación de su despido.
Los dueños del local argumentaron que su comportamiento fue “poco profesional” y que había roto una supuesta regla interna sobre no interactuar con celebridades más allá del servicio.
Devastada, Mariana compartió su historia en redes sociales, sin imaginar que se viralizaría en cuestión de horas. Miles de personas se solidarizaron con ella y criticaron al restaurante por su decisión. Lo que nadie esperaba era que la historia llegara al mismísimo Canelo Álvarez.
Al día siguiente, Mariana recibió un mensaje que lo cambió todo: el equipo del boxeador la contactó para ofrecerle ayuda. Pero lo más sorprendente fue que el propio Canelo decidió recompensar su generosidad de una manera inesperada.
El campeón mexicano no solo le ofreció una compensación económica, sino que también le consiguió una nueva oportunidad laboral en un prestigioso restaurante de la ciudad. “Las buenas acciones siempre tienen recompensa”, escribió Canelo en sus redes sociales tras conocer el caso.
La historia de Mariana nos recuerda cómo un acto de bondad puede tener consecuencias inesperadas. Aunque perdió su trabajo injustamente, la vida le tenía reservada una sorpresa aún mejor.
Ahora, no sólo tiene un mejor trabajo, sino que su historia ha inspirado a muchas personas a seguir siendo amables sin miedo a las consecuencias.